Toyota Rav4 2019: Un cambio sustancial… y muy acertado

Se trata de la quinta generación del Vehículo Utilitario Deportivo que creó todo un segmento en el mundo y en esta ocasión se inició su desarrollo con un replanteamiento de su posición en el mercado, volviendo a poner el listón muy alto para ser alcanzado por la competencia.

Llegado el momento de diseñar y desarrollar una nueva generación de este modelo no era tarea sencilla, caer en el error de planeación era cosa de un clic. Y es que las cifras de este modelo son impresionantes, como por ejemplo: es el vehículo más vendido en la actualidad en su clase, duplicando el volumen en los últimos cinco años, aproximadamente 408,000 unidades en los EE. UU. durante el 2017. Eso hace que el Rav4 Toyota sea el vehículo más vendido de su segmento en dicho país. En México también ha tenido sus éxitos comerciales, lo mismo que en otros mercados del mundo.

Independientemente de lo anterior, de alguna manera ha ganado adeptos fieles a quienes no había que defraudar y si había que rejuvenecer el concepto, con el desarrollo de esta quinta generación, tampoco había que ofrecer lo mismo de siempre, y mucho menos ser tan radicales como para parecer que ya no encaja en la propuesta original que es la de un vehículo utilitario deportivo compacto. La tarea era difícil y en Toyota tuvieron a bien entender que lo más lógico era crear una evolución natural de la propuesta de Rav4 original.

El nuevo Rav4 tiene ahora una estética que perdió su rostro amable y juvenil a cambio de una expresión más ruda, incluso desafiante, según sus creadores es “Aventurera y refinada”. La nueva imagen es tomada de los vehículos más grandes de la compañía, especialmente de los más rudos, como las camionetas pick up, en especial la Tundra. El resto de cuerpo va en consonancia, es menos musculoso, pero más robusto. Esa estrategia me parece muy atinada, al fin de cuentas las pick up de Toyota han demostrado ser, a todas luces, resistentes y aptas para las tareas más desafiantes y ya era hora de que la Rav4 heredara parte de ello.

La parrilla y otros elementos exteriores son ahora poligonales, octágonos para ser más precisos; el resto del cuerpo es más cuadrado, tiene atinado diseño de los componentes como las luces delanteras y traseras, que incluso, con una estructura tridimensional, le otorgan sofisticación y un toque techno. A diferencia de la anterior, parece que a la parte trasera le pusieron un poco más de entusiasmo para trazarla y luce con un poco más de elegancia que el resto del vehículo, lo cual no está mal, ya que no se trataba de crear todo un vehículo militar.

Aunque es más cuadrada, hay una función mejorada en la aerodinámica, según lo explica la marca, incluida la ligera reducción en la altura del vehículo. “El diseño de la lámpara de combinación trasera angular no solo sugiere estabilidad, sino que también contribuye a la estabilidad a través de aletas estabilizadoras en las lentes exteriores. La nueva forma de las manijas de las puertas exteriores también ayuda en ese sentido. En la parte trasera del techo, un gran alerón y aletas laterales contribuyen al rendimiento aerodinámico.”

La distancia entre ejes creció 3.05 centímetros, para un total de 2.690 metros, el largo total es de 4.6 metros para todas las versiones excepto la Adventure que es de 4.615 metros. Todas las versiones tienen la misma altura de 1.685 metros, pero la Adventure, que lleva tracción en las cuatro ruedas, tiene altura con respecto al piso de 200 mm y el resto 195 milímetros. También crecieron marginalmente el ancho de las vías.

En el interior, mejoraron algunos plásticos, aún no tiene la experiencia táctil de Mazda CX5, pero son mucho mejores que los de los demás competidores del segmento. Hay algo importante aquí, dado que se trata de un vehículo para propósitos más rudos, no era necesario que fueran los plásticos demasiado elegantes, sino más bien que transmitieran durabilidad a las exigencias, y lo logran bien.

En nuestro primer acercamiento con la nueva Rav4 dimos cuenta de que su marcha es más refinada que la anterior, el aislamiento de las vibraciones del camino es de alta calificación, lo mismo que la rumorosidad y aceptablemente en cuanto a ruido aerodinámico. Se siente muy bien pegada al piso y eso es consecuencia, tanto de haber bajado un poco la altura, como de haber bajado los componentes del tren de potencia un tanto. Por lo demás, la suspensión es un más firme, lo que contiene otro tanto los movimientos laterales del vehículo en curvas continuas.

La posición de manejo es muy buena para los usos, se tiene buena visión al frente, los lados, y gracias a que los reglajes del volante y los asientos tienen un buen rango de profundidad y altura, es relativamente fácil hacerse de una posición propia casi de inmediato. Me gustó que los asientos dan alojo a personas de complexión robusta con una solvente amplitud de los respaldos.

La dirección es todavía mejor, tiene un tacto más directo, muy poca reluctancia y adecuado subviraje, se puede cambiar de dirección con mucha facilidad, lo que repercute en una agilidad que antes no tenía y cuando se va a paso alegre en curvas continuas se tiene muy buena retroalimentación. Además, cuando se va en recta es muy estable linealmente, lo que abona para la estabilidad general. Si, llega a sentirse un poco más de peso, pero nada que afecte el desempeño general.

Las reacciones del tren de potencia están en un plano adecuado, más tomando que se trata de un Toyota, no va a despeinar a nadie, pero tampoco se va a quedar atrás. El motor es un cuatro cilindros “Dynamic Force” (ya ven que a Toyota le gusta poner nombres impactantes a sus motores) de 2.5 cilindros que genera 204 caballos de fuerza y 179 libras-pie de torque y este va acoplado a una nueva transmisión automática de ocho velocidades.

La nueva Rav4 está equipada con 3 modos de manejo (Normal, Eco y Sport) en la versión LE, para las versiones XLE, Adventure y Limited además de los tres modos de manejo básico, integran los modos multi-terreno (Mud & San, Rock & Dirt y Snow). Las versiones XLE, Adventure y Limited son las que llevan el sistema de tracción en las cuatro ruedas que produce una entrega inteligente de torque y adicionalmente cuentan con suspensión independiente en las 4 ruedas (delantera tipo McPherson y trasera de doble horquilla).

Manejamos la versión XLE básicamente en modo Normal y con éste la aceleración es muy progresiva, sin sobresaltos por parte de la transmisión la que contrariamente a lo que se pudiera pensar, fue muy difícil hacerla titubear respecto a que velocidad elegir, por lo que me parece que este conjunto es uno de los más atinados en suavidad de respuesta en la entrega de potencia y torque.

Además de contar con el sistema HAC (Hill Assist Control) que ayuda a arrancar en pendientes incorpora el sistema DAC (Downhill Assist Control) en las versiones Adventure y Limited mismo que proporciona estabilidad en descensos pronunciados Integra también control dinámico vectorial de torque que distribuye la energía cuando se conduce a través de lodo, arena, rocas, tierra y nieve (XLE, Adventure y Limited), la versión Hybrid cuenta con un reforzador electro-hidráulico que multiplica la fuerza de frenado para una rápida respuesta, mejorando el control en todo momento.

El sistema de Información y entretenimiento es de lo más completo para casi todas las versiones y es medianamente aceptable el desempeño dinámico del audio de las opciones disponibles. Se puede contar con interfase para CarPlay, pero no Android Auto.

Debemos señalar que la RAV4 Hybrid se configura con un motor Dynamic Force de ciclo Atkinson con una potencia de 219 HP (15 caballos más que las versiones de gasolina), una transmisión ligera y compacta de engranaje planetario propia del sistema HSD (Hybrid Synergy Drive) y 7 cambios simulados. Cabe destacar que con esto es la única SUV del segmento con arreglo serie-paralelo que trabaja en sinergia con el motor. También la probamos, pero se merece un capítulo aparte ya que se trata de una opción EXCELENTE de hibridación.

Esta nueva entrega es de lo más atinado, aunque personalmente no me haya gustado tanto el cambio de un vehículo que ya tenía una personalidad más amable y musculosa, a cambio de algo más robusto y desafiante. Prácticamente mejora en todo, aunque en lo que respecta a sistema de audio y conectividad tenemos un área de oportunidad. Su desempeño es loable y hasta podría decir que invita más al manejo emotivo. Toyota sorteó con destreza el desafío de renovar la Rav4.

Precios por versión: LE – $413,900; XLE – $459,100; ADVENTURE – $514,900; LIMITED – $559,900 y HYBRID – $578,900.